CREATIVIDAD
Esta es la paradoja. El auténtico creador sabe que él no ha
creado nada, la existencia ha trabajado a través de él. Él ha sido un
instrumento. Ese es el verdadero arte, en el que el artista desaparece, entonces no actúan su ego,
ni su neurosis y el artista se convierte en místico, no solo técnicamente
correcto, sino existencialmente auténtico.
Cuanto menos hay del artista en su obra, más perfecta es
esta. Por eso el verdadero artista no busca la perfección, busca la totalidad.
Se entrega totalmente a la gracia y él desaparece. Osho.
Como Cristianos podemos decir, según está en La Biblia “Ya
no vivo yo, Cristo vive en mí”.